Stan Lee, el creador de varios superhéroes del universo Marvel Comics que se convirtieron en figuras míticas de la cultura popular, murió a los 95 años, informó su hija este lunes a Reuters.
Como escritor y editor, Lee fue clave en la transformación de Marvel en un gigante del cómic en la década de 1960, cuando en colaboración con artistas como Jack Kirby y Steve Ditko creó superhéroes que cautivarían a generaciones de jóvenes lectores.
El legendario cocreador de Marvel Comics luchó con diversas enfermedades en los últimos años, producto de su avanzada edad.
Antes, de acuerdo con el portal TMZ, una ambulancia abandonó este lunes muy temprano su hogar con dirección al Cedars-Sinai Medical Center.
De acuerdo con información de allegados al guionista, la muerte de su esposa Joan en 2017 le afectó muchísimo, de ahí en adelante nunca recuperó la chispa que lo caracterizaba.
Al escritor se le debe gran parte de los superhéroes del universo Marvel, como fueron Los 4 Fantásticos, Spiderman, Iron Man, el nacimiento de Los Vengadores, Hulk y el Capitán América, entre otros.
Lee se ganó una reputación en el mundo del cómic principalmente por darle un nuevo matiz de complejidad y humanidad a los superhéroes. Sus personajes no eran de piedra, aunque parecían haber sido cincelados en granito. Sentían amor y preocupaciones por el dinero e incluso albergaban sentimientos de inseguridad.
"Sentí que sería divertido aprender un poco sobre su vida privada, sus personalidades, y demostrar que son humanos y superhéroes", dijo Lee a NPR News en 2010, quien tuvo ayuda para diseñar a los personajes pero se hizo cargo de promoverlos.
Decenas de películas de Marvel Comics, de las cuales casi todos los personajes principales habían sido creados por Lee, fueron producidas en las primeras décadas del siglo XXI, recaudando más de 20 mil millones de dólares en todo el mundo, de acuerdo a analistas de la industria del cine.
Spiderman es uno de los personajes ficticios más exitosos de todos los tiempos. Las cinco películas del superhéroe lanzadas entre 2002 y 2014 recaudaron casi 4 mil millones de dólares en todo el mundo. Lee, como empleado de Marvel, recibió pagos limitados por la inesperada ganancia de sus personajes.
En un contrato de 1998 luchó por una cláusula del 10 por ciento de las ganancias de las películas y programas de televisión con personajes de Marvel. En 2002 demandó para reclamar su parte, meses después de que Spiderman conquistara los cines. En un acuerdo legal tres años después, recibió un pago único de 10 millones de dólares.
Los estudios de Hollywood hicieron de los superhéroes la piedra angular de su estrategia de producir menos películas y explotar los grandes éxitos de taquilla. Algunas personas asumieron que, como resultado, la riqueza de Lee se había disparado, algo que él siempre negó.
"No tengo 200 millones (de dólares). No tengo 150 millones. No tengo 100 millones ni nada parecido a eso", dijo Lee a la revista Playboy en 2014.
En 2008 Lee recibió la Medalla Nacional de las Artes, el más alto premio del Gobierno estadounidense para los artistas creativos.